Castelnau-de-Montmiral y sus alrededores: su horizonte da al bosque de Grésigne y al valle del Vére.
Esta bastida situada a las puertas de las Gargantas del Aveyron, en la ruta de las bastidas, es un verdadero remanso de paz. A solo 30 minutos de Cordes sur Ciel y de Penne, a 40 minutos de Albi y a 1 hora de Toulouse, en «el Monte desde el que se ve todo» la cultura espera al visitante…
Entre relajación y refrescor...
Para los niños no hay nada mejor que el centro de ocio Vère-Grésigne, en el que realizar actividades diversas y variadas: baño vigilado, tobogán, hidropedales, tenis, voleibol, ping-pong, minigolf, pesca… ¿y por qué no disfrutar de una barbacoa?
Historia, degustación y ensueño...
Caminar por los callejones...
Descubra la historia a través de los diversos lugares clasificados como Monumentos Históricos. Camine por las estrechas calles de este pueblo, clasificado entre los “Pueblos más bellos de Francia”, “Village fleuri” y “Vignobles & Découvertes”.